Cabrera Escudero, Natalia2021-01-252021-01-252019http://hdl.handle.net/20.500.12254/1814Ensayo Crítico (Licenciado en Artes Visuales, Mención Escultura)--Universidad Finis Terrae, 2019La música ha sido una de las primeras experimentaciones artísticas que hemos explorado como especie, ha simbolizado una forma innata de expresarnos, de divertirnos, de jugar. Hay una curiosidad intrínseca en nosotros que nos lleva a interesarnos en ella. Para mí, particularmente, el sonido ha marcado mi vida desde la infancia. Vengo de una familia de músicos y desde pequeña he tocado distintos instrumentos, por lo que siempre me ha generado curiosidad todo ese mundo. Por otro lado, mi interés por los mecanismos y objetos escultóricos se origina en mi infancia también, mi madre, coleccionista desenfrenada de objetos bellos, antiguos, obras de arte; mi padre coleccionista de instrumentos y aparatos electrónicos relacionados. Actualmente estoy trabajando en mi proceso de obra con diferentes dispositivos y sistemas. Mi intención es hacer esculturas cinéticas, es decir, obras que tienen movimiento, y son de especial interés aquellas que funcionen a través de la acción humana. Además, el objetivo de estos trabajos es reproducir el sonido del agua al caer y, dependiendo de la velocidad que se gire, estás suenen con ritmos diferentes. Incluso al ser giradas muy fuerte puedan llegar al silencio. Están pensadas para ser operadas manualmente o mediante un motor. Estas esculturas podrían ser clasificadas como arte sonoro, cinético e incluso performativo. Es una escultura basada en el instrumento Palo de agua, o palo de lluvia, que originalmente se utilizaba de forma religiosa para atraer el agua. También es un llamado a jugar con la idea de ritual, de intentar “llamar” el agua, y traerla a una sala cerrada donde sabemos que no va a llegar.esAtribución-NoComercial-CompartirIgual 3.0 Chile (CC BY-NC-SA 3.0 CL)ARTE CINÉTICOAGUAESCULTURAARTE SONOROTesisAguirre Robertson, Elisa prof. guíaJösch Krotki, Andrea prof. guía